El riad tiene una hermosa decoración y el personal fue increíblemente atento durante nuestra estancia. Sin embargo, el ruido de la cocina se sentía un poco durante la noche.

Un desayuno que sorprende

Al llegar, nos recibió un aroma encantador. Las habitaciones eran acogedoras y estaban decoradas con gran estilo. Cada mañana disfrutamos de un desayuno delicioso, con frutas frescas y pasteles típicos, y el personal siempre estuvo atento a nuestras necesidades. La ubicación era ideal para explorar la medina, lo que hizo que nuestras caminatas fueran muy agradables.

El wifi tuvo problemas de conexión, lo que dificultó un poco mis planes de compartir fotos en redes sociales. Además, el ruido proveniente de la cocina se escuchaba un poco durante la noche, lo que a veces alteraba la tranquilidad.

El desayuno fue una excelente manera de comenzar el día, pero asegúrate de preguntar por la opción de crepes adicionales, ya que son deliciosos y limitados.

decoración cuidada, azotea agradable, piscina pequeña

Las habitaciones son poco insonorizadas!!! No hay suficiente información clara sobre los pagos y se siente un desorden en la gestión. Además, la ducha no drena bien, lo que puede ser molesto.

La habitación era ruidosa, la cocina estaba justo al lado y ilusionado, pensaba que me cambiarían de habitación, pero ni eso hicieron. El desayuno supuestamente abundante era repetitivo, sólo lo salvó que estaba nuevo. Esperaba un pequeño detalle de cortesía para compensar la incomodidad, pero no debí pedir tanto. Casi escribo una buena reseña, pero no pude

El desayuno fue una de las mejores partes, siempre fresco y sabroso. Sin embargo, la habitación resultó ser ruidosa, especialmente por la cercanía a la cocina y las escaleras. Aunque el personal fue amable, la falta de atención en momentos críticos, como al salir a la madrugada, podría mejorar.

La ubicación es ideal, dentro de la medina, con acceso fácil (noche y día). Las habitaciones están cuidadosamente decoradas y muy limpias. El personal, siempre atento, se esmera en hacerte sentir como en casa. El desayuno tiene delicias frescas, incluyendo un delicioso zumo natural!

El ruido de la cocina se sentía un poco por la noche, y hubiera sido mejor tener opciones más variadas en el desayuno.

el desayuno es abundante y se puede comer en la terraza. el aire acondicionado en la habitación 1 no funcionaba bien.

Un rincón auténtico, decoración preciosa y la calma perfecta para descansar. El personal habla varios idiomas, lo que lo hace más fácil.

No hay un botón mágico para silenciar a los vecinos ruidosos, ¡me hacían pensar que estaba en una obra de teatro!

una experiencia inolvidable en riad dar blanche, trato excepcional y desayuno delicioso para un comienzo perfecto en marrakech

Simplemente asombroso! Desde el primer momento, el servicio del personal fue excepcional, haciéndonos sentir como en casa. El desayuno era un verdadero festín, con delicias locales que nos dejaron con ganas de más. Cada rincón del riad, desde la decoración auténtica hasta la cómoda sala común, nos encantó. La ubicación era ideal, cerca de todo lo que queríamos explorar. Sin duda, volveremos para un segundo capítulo de esta experiencia mágica.

Ubicación perfecta, en el corazón de la medina. Desayuno increíble con opciones variadas cada mañana, y la amabilidad del personal hizo que nuestra estancia fuera aún más especial. Habitaciones limpias y decoradas con un toque auténtico, un verdadero refugio después de explorar Marrakech.

Buen desayuno y personal siempre listo para ayudar. Poco ruido en la habitación.

La habitación era tan acogedora que me sentí como si estuviera en un cuento de hadas, con un cuarto de baño que tenía más comodidades que mi propio hogar, incluyendo una ducha walk-in que me hizo querer quedarme allí para siempre. El aire acondicionado funcionaba a la perfección, convirtiendo el calor de Marrakech en una suave brisa.

Falta de insonorización

La experiencia en el Riad Dar Blanche fue excepcional. La atención del personal, siempre sonriente y dispuesto a ayudar, fue destacable, haciendo que nos sintiéramos como en casa. La habitación, decorada con un estilo único y confortable, ofrecía un ambiente acogedor. El desayuno, variado y delicioso, era un festín cada mañana. Sin embargo, noté que la insonorización no era la mejor, lo que podría ser un inconveniente para quienes prefieren un ambiente más tranquilo.